250 gramos de espinacas frescas, 3 cucharadas de tahini (crema de sésamo), 2 cucharadas de salsa de soja.
Escaldar las espinacas un par de minutos en agua hirviendo, lo suficiente para que no queden crudas, pero no demasiado, para que queden ligeramente crujientes. Escurrirlas y sumergirlas en agua helada para detener la cocción. Escurrirlas bien y trocearlas. Mezclar la salsa de soja y el tahini y aderezar las espinacas con la mezcla.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
¡Viva el gomaae! Ñam.
Publicar un comentario