Días después de la sopa anterior, fui a mi supermercado chino favorito (Balmes con Pelayo, en Barcelona) y compré todo aquello que hace falta en la cocina de cualquier adicto a las sopas japonesas. Mis amigos Quico y Chelo me regalaron sake y choya (un licor riquísimo, gracias, chicos ;-)) y me vine para casa con ganas de sopa. Así que me preparé un plato típico del pueblo de Satsuma y casi inmediatamente me entraron ganas de viajar.Este plato tiene un montón de variaciones. He encontrado recetas con cerdo, con pollo y con un montón de verduras diferentes. Yo lo hice con las verduras que tenía en casa (y las que más me gustan).
1,5 litros de caldo de pescado (o dashi), 5 cucharadas de miso rojo, 50 gramos de brotes de soja, dos zanahorias, 5 setas shiitake secas, 2 cebollas tiernas, 1/4 de col china, un trozo de nabo daikon (yo lo encontré liofilizado y así lo usé).
Poner las setas shiitake a remojar en agua caliente. Dejar que se ablanden durante una hora.
Calentar el caldo hasta que hierva. (Yo usé caldo de pescado casero, así que lo dejé hervir un rato y le fui quitando la espuma.) Coger un par de cucharones de caldo y disolver en ellos el miso. Devolver el caldo con miso a la olla. Poner el fuego al mínimo.
Cortar las zanahorias, la col, las cebollas y el daikon en juliana. Cortar las setas shiitake en rebanadas. Añadir primero la zanahoria y las setas. Pasados unos minutos, añadir el resto de las verduras.
Dejar cocer un par de minutos y servir muy caliente.






